Chile
es un largo y estrecho territorio que alberga una infinidad y gran
variedad de aves. Están en el altiplano, en la Patagonia, en los
bosques, costas y cumbres andinas; las encuentras repartidas por todo
Chile. Es ideal para los amantes del birdwatching.
En
el altiplano, en el norte, en excursiones hacia Putre, Parinacota o
el lago Chungará verás gaviotas andinas de cabeza negra, fochas y
taguas gigantes, además de abundantes colonias de flamencos que
colorean el paisaje y se esparcen por salares y lagunas de ensueño.
Espectaculares zonas de flamencos son el salar de Atacama, en las
cercanías de San Pedro de Atacama, y el lago Chungará, en el
altiplano, al interior de Arica.
Otro
avistamiento imperdible es el de los pingüinos de Humboldt y de
Magallanes, dos especies en extinción que se pueden encontrar en la
Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, en la región de Coquimbo,
como también en la costa de la Isla Grande de Chiloé y cerca de
Punta Arenas.
Pero
la gran estrella chilena es el legendario cóndor andino. Admirarlo
mientras describe círculos sobre las montañas es sobrecogedor,
sobre todo en el Parque Nacional Torres del Paine, declarado Reserva
Mundial de la Biosfera por la Unesco, en las cercanías del glaciar
San Rafael o en el Parque Nacional Alerce Andino. En medio del bello
paisaje de la Patagonia, puedes encontrar más de ciento veinte
especies de aves, incluidos los ñandúes.
En
los bosques de los parques nacionales como el de Villarrica,
Huerquehue, Conguillío, Vicente Pérez Rosales, Puyehue, o la
Reserva Nacional Huilo Huilo, podrás descubrir entre el follaje gran
variedad de aves, como carpinteros, y la más misteriosa, el chucao,
que no se deja ver muy seguido aunque se escuche muy cerca su sonido
como de instrumento de percusión.
También
podrás hacer birdwatching en Chiloé y en el extremo sur; en pleno
Estrecho de Magallanes se encuentra la Isla Navarino, donde puedes
visitar el Parque Etnobotánico Omora. El ave más emblemática de
este lugar es el carpintero de Magallanes ogigante, que sorprende con
sus característicos picoteos en la madera seca.
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