1. THE HAMPTONS, DONDE VERANEAN LOS
NEOYORQUINOS
En
la zona este de Long Island, a unas dos horas de Nueva York, se encuentra el
lugar favorito de veraneo para los neoyorquinos más acaudalados, The Hamptons. Escape necesario durante los meses más
calurosos, se puede visitar durante el resto del año sin tantas aglomeraciones
y a precios más bajos. Muchas estrellas del cine y la música tienen aquí su
refugio –con vistas al mar– para los fines de semana.
2.
CATARATAS
DEL NIÁGARA, MARAVILLA NATURAL
En
la frontera entre Estados Unidos y Canadá, en la región de los Grandes Lagos,
se encuentra uno de los accidentes geográficos más importantes de toda
Norteamérica: las Cataratas del Niágara. Para
conocerlas, tanto en su vertiente estadounidense como en la canadiense, lo
habitual son los paseos en barco. Para llegar hasta allí, se organizan
excursiones de un día con vuelo desde Nueva York hasta el aeropuerto de
Buffalo.
3.
BOSTON,
CIUDAD DE LA LIBERTAD
En
el estado de Massachusetts, a unos 350 kilómetros de Nueva York, Boston es una
de las ciudades más antiguas de Estados Unidos. Se puede conocer en una visita
rápida gracias al Sendero de la Libertad, una ruta de unos cuatros kilómetros
marcada con una línea roja que recorre las principales atracciones de la
ciudad. A solo quince minutos del centro de Boston se
encuentra la prestigiosa Universidad de Harvard, en
Cambridge.
4.
FILADELFIA,
LA PRIMERA CAPITAL DE ESTADOS UNIDOS
Aunque
perdió su posición en pro de Washington, Filadelfia
sigue teniendo un lugar destacado en la historia de Estados Unidos: allí se
firmó la Declaración de Independencia del país. Su imagen más conocida es la de
la escalinata del Museo de Arte, gracias a la mítica escena de la película
‘Rocky’. Bien comunicada con Nueva York gracias al tren, puede ser una
excursión de ida y vuelta en el día si no se dispone de mucho tiempo.
5.
WASHINGTON
D.C., EL HOGAR DEL PRESIDENTE
La
manera más rápida de llegar hasta la capital de Estados Unidos desde Nueva York
es el avión, un trayecto de menos de una hora que une a las dos ciudades más
importantes del país. La Casa Blanca, el Capitolio o la librería del Congreso
son algunos de los imprescindibles de Washington, una
ciudad repleta de historia y simbología.
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